23 marzo 2004

Dragon War

Recientemente, navegando por la red, y concretamente en la web Cookies On The Net, descubrí que próximamente se va a estrenar una película titulada D-War, por mi curiosidad natural, y mi gusto por la fantasía, ciencia ficción, mitologías, y en este caso concretamente por los dragones, busqué su web oficial con intención de ver de que iba realmente. Lo cierto es que esta web tiene un diseño espectacular, tal vez demasiado si "calzas" una conexión por modem de 56kbs, como es aún mi caso, pero de todas formas es digna de visitarse. En cuanto al film en cuestión, resulta ser una superproducción japonesa, a cargo de Younggu Art, y dirigida por Hyung Rae Shim, en la que al parecer se ha invertido una pasta curiosa con ánimo de plantarle cara a la hegemónica industria norteamericana, y que cuenta con unos efectos especiales muy distantes de los que los nipones nos tienen acostumbrados en sus películas de Godzilla y similares, vamos, que nada de tíos disfrazados de monstruos, aquí todo es CGI, aunque es en esta cuestión donde le veo a su vez su punto fuerte y su punto débil, me explico: por un lado en cuanto a fluidez de movimientos y diseño de criaturas, me parece que han logrado un nivel muy alto, en cambio en cuanto a la integración de estas imágenes generadas por ordenador, con los escenarios de imágen real, en ocasiones se nota demasiado, como si estuvieran superpuestas y no en el mismo plano, aunque también es cierto que quizás sea injusto compararlos con los que nos ofrecen normalmente compañías más experimentadas y probablemente con más medios como ILM ó Wetta por nombrar algunas. Por poner un ejemplo de esto último, digamos que la sensación es la misma que la que percibí cuando ví la edición remasterizada de Star Wars, con los añadidos digitales que se realizaron para la ocasión, hace ya 7 años (a cargo de ILM precisamente). También debo comentar que por lo que se ve en el trailer deben haberse gastado toda la pasta en efectos digitales, ya que la sensación que me producen los decorados y vestuarios de lo que parece ser un Japón feudal, dista mucho, muchísimo, del mostrado en la reciente y excelente "El último Samurai". De todas formas yo estoy deseando ver el resultado final, y sinceramente espero que el guión esté a la altura del proyecto, aunque tengo mis dudas.

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